El barrio del Hoyo tiene unos puntos que lo delimitan: El Roque, la Huerta Peña, el Barranquillo del Castaño, y el Hoyo de Arriba, en el entorno de la Fuente del Borbollón.
Cuenta con una población de de alrededor de 1.000 habitantes.
Manuel Pícar y Morales nos describe en su obra Teror. Monografía y excursiones por el cronista de la Villa (1905), a uno de los personajes que en aquel entonces habitó en este caserío: “En Teror, como en todos los pueblos, hay entes legendarios perpetuadotes de la jocosidad burlesca, infortunados que nacieron para blanco de las iras infantiles: entre ellos está Juan el del Hoyo, andrajoso y macilento, prototipo de la mansedumbre y de la equidad, por nada se enfada, y por una perra gorda hace todo el servicio de carga y transporte y trae una botella de agua de la Fuente Agria”.
Como señala Vicente Hernández Jiménez en Teror: Historias, semblanzas, apuntes (1991), también fueron vecinos del barrio, Maestro Miguel León y José del Pino Herrera. El primero fue un gran maestro mayor de obras, que dirigió la construcción de la Iglesia del Corazón de Jesús en Llano Roque y la muralla del Monasterio del Cister. José del Pino Herrera tuvo la primera empresa de transportes de viajeros de Teror a Las Palmas, primero con coches de caballos y después con vehículos a motor.