El nuevo Juez de Paz de Teror reconoce su satisfacción al ocupar este cargo vocacional y altruista, manifestando que “ha sido mi gran sueño y me entregaré con total dedicación al cargo”.

Jesús Manuel Santana Viera, más conocido como Suso, tomó posesión como nuevo Juez de Paz de Teror el pasado mes de junio, tras su ratificación en pleno por unanimidad de la Corporación municipal y posterior juramento ante el decano del Juzgado de Instrucción de Arucas.

Suso Santana manifiesta su satisfacción al ocupar este cargo vocacional y altruista, ya que no es remunerado: “Ser juez de Paz de mi municipio ha sido mi gran sueño; me gusta que los problemas se arreglen por las buenas y que la gente se lleve bien”, explica. > ENTREVISTA EN RADIO TEROR

En el acto de toma de posesión en Teror, presidida por el alcalde Sergio Nuez, junto al concejal delegado Josué Déniz, Santana agradeció a la Corporación municipal su designación. “Soñaba con realizar esta actividad y me entregaré con total dedicación para cumplir con mis funciones de la mejor manera”, manifestó el nuevo Juez de Paz.

UN BUEN MEDIADOR Y CON FORMACIÓN

Natural del barrio terorense de Miraflor, Suso nació en 1963 y estudió en los colegios de Miraflor, Monseñor Socorro y el IES de Teror. Se formó como Graduado Social y se graduó en Derecho. Actualmente cursa un máster a la Abogacía y a la Procura. Aunque el cargo de Juez de Paz no requiere titulación específica, la pasión de Suso por el estudio y el conocimiento le ha motivado a realizar diversos cursos sobre mediación y de ámbito jurídico. Al mismo tiempo, ha ejercido durante muchos años como comercial, trabajo que le ha permitido conocer a fondo el mundo de la mediación y las relaciones humanas.

Entre las funciones del Juez de Paz, Suso Santana da especial relevancia a la resolución de conflictos entre la vecindad, ayudar de forma cercana y dialogada a resolver problemas cotidianos, que surgen tanto en ámbitos vecinales como familiares y de menor importancia en el ámbito penal. Su objetivo principal es ayudar a las partes involucradas a llegar a un acuerdo mutuo sin tener que recurrir a un procedimiento judicial.

Al mismo tiempo, el Juzgado de Paz tiene la responsabilidad de llevar el registro civil, registrando nacimientos, matrimonios y defunciones. “Como anécdota, los primeros trámites que he realizado como Juez de Paz han sido resolver una licencia de enterramiento y luego un registro de nacimiento”, comenta Suso.

EL JUZGADO DE PAZ, UNA INSTITUCIÓN CERCANA

Uno de los objetivos que además se ha propuesto desde su cargo, que ostentará durante 4 años, es difundir la labor del Juzgado de Paz como una institución cercana, a través de los centros educativos y medios de comunicación municipales, para que la ciudadanía conozca sus funciones y acudan a resolver disputas de menor envergadura antes de recurrir a denuncias judiciales.