El Casino «Juventud Unida»
El Casino de Teror se inauguró el 12 de julio de 1869, bajo la denominación de «Sociedad El Progreso». Su primer presidente fue D. Francisco Azopardo, un comerciante de origen maltés, propietario de un comercio en la planta baja la Plaza de Ntra. Sra. del Pino. Durante el siglo XIX este tipo de establecimientos florecieron en toda la geografía isleña. Se trataba de entidades de carácter recreativo y cultural en las que se organizaban bailes y festejos, veladas literarias, piezas musicales y representaciones teatrales para aficionados.
El Casino de Teror vivió una época de esplendor durante los años 1897 y 1898, motivada por la llegada a la Villa de un buen número de familias burguesas y de la élite intelectual, procedentes de la ciudad de Las Palmas, ante el temor de una posible invasión de los Estados Unidos de América, en el contexto de la pérdida de Cuba. Entre esos miembros de la élite cultural capitalina destacaron personalidades como el compositor y director de orquesta D. Bernardino Valle Chinestra (1849-1928) y el pianista Eduardo Bonny, quienes organizaron recitales musicales y conferencias. Precisamente, en esa época el Casino pasó a denominarse «Círculo de Instrucción y Recreo».
Este primer casino se trasladó desde su ubicación original a un edificio emplazado en la Alameda. Clausurado, fijó su sede en la casa que fue del médico local D. Antonio Yánez Matos, cuya inauguración tuvo lugar el 11 de febrero de 1934 bajo la denominación de «Casino Juventud Unida». Hasta su desaparición, tuvo un periodo de gran actividad en el que se organizaron, entre otras, exposiciones de arte, recitales literarios, comedias y conciertos, y durante la década de los 70 y 80, festivales de cine aficionado.