Becas Séneca |
Es una pena que la política de “recortes” se cebe siempre en las mismas áreas: servicios sociales, sanidad y educación, por mencionar algunas de las prestaciones que las administraciones públicas nunca deben de desatender. Suma y sigue, con la educación. Las penúltimas víctimas de esta cicatera política son los alumnos-as con becas Séneca, que como se sabe son aquellas ayudas destinadas a garantizar de alguna forma la movilidad de estudiantes entre diferentes universidades españolas. Un instrumento para hacer estado, ya que estos desplazamientos estudiantiles de una región a otra nos hacen sin duda alguna más España. Con lo que se llenan la boca los de la derecha conservadora con eso de E-S-P-A-Ñ-A.
El Ministerio de Educación, que lleva el inefable José Ignacio Wert lo ha dispuesto así hace unos días: estas becas desaparecerán en la convocatoria 2013-20124.El Ministro ha razonado su posición en motivos presupuestarios, insistiendo que el incremento del número de solicitantes de becas por motivos de renta –debido a la crisis –hace necesario priorizar y concentrar todos los recursos disponibles para preservar las becas de carácter general, recortando el resto.
Unos razonamientos que no se sostienen de ninguna manera. La única finalidad detrás de todo esto es desmantelar el sistema de educación pública que teníamos en España, para que solo puedan estudiar en buenas condiciones los hijos de los ricos. Es que afirmar que las Séneca desaparecen para mantener las becas generales demuestra muy poca vergüenza. El presupuesto para becas se ha reducido en un 12 % en el año 2012, además de incrementar los requisitos para acceder a ellas, de tal suerte que son muchos menos los estudiantes becados.
Las Becas Séneca,-el equivalente al conocido programa Erasmus pero dentro del territorio nacional- ya habían experimentado un recorte de más del 50 % en el último presupuesto. A nadie se le escapa que esta desafortunada decisión permitirá al Ministerio ahorrarse cerca de 7 millones de euros. Según datos oficiales, en el presente curso, 2.224 estudiantes se benefician de una Beca Séneca, ayuda dotada con 500 euros al mes, más una ayuda única que oscila entre los 120 y 200 euros para los desplazamientos del alumnado en base a la distancia geográfica de cada uno de ellos.
A juicio de los afectados, si se reducen las ayudas no podrán competir laboralmente. Es más los rectores de las universidades españolas hablan de un “golpe de muerte” a los programas de intercambio universitario, quejándose de que el Ministerio de Educación no les escucha. Sobre el particular también se ha pronunciado la Asociación Canaria de Estudiantes Progresistas que ha pedido la continuidad de las Becas Séneca para el nuevo curso. Esta Asociación estudiantil recuerda que más del 85 % de los estudiantes que acceden a un programa de movilidad lo hacen a través de una beca. Insiste esta Asolación que mantener esta movilidad no es un capricho, sino un requisito indispensable de una economía que quiere ser productiva y competitiva a nivel internacional.
Muchos expertos en educación están de acuerdo en afirmar que estas Becas Séneca constituyen uno de los mejores instrumentos para mejorar la excelencia y la calidad del sistema educativo de nuestro país, “Un discurso- señalan- que le gusta repetir al Ministro Wert, pero que no se preocupa lo más mínimo en llevarlo a la práctica”.
Se calcula que esta decisión ministerial afectará a un centenar de alumnos de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria con lo que perderán la opción de cursar al menos un año académico de su carrera en un centro superior del resto del Estado. Desde la universidad grancanaria se afirma que las universidades españolas no dan por acabado el programa a pesar del anuncio del Ministerio de que se priorizará la políticas de becas generales para el próximo curso académico. Desde la Conferencia de Rectores se asegura que se apurarán las negociaciones con el Ministro Wert de cara a mantener al menos una financiación. Ya sabemos que si estas ayudas desaparecen, es muy complicado que se recuperen en años venideros. Y esta suspensión ¿qué quiere decir? Pues que a partir de ahora, si se quiere seguir con este Programa Séneca serán las familias de los propios alumnos las que tendrán que pagar las estancias de sus hijos en otras universidades. Y como están las cosas, mucho nos tememos que se haya firmado su sentencia de muerte. Amén.
Compartir en redes sociales