De ambiguos, pocos claros y en ocasiones desafortunados han sido definidos los eslóganes o lemas que los distintos partidos que concurren a estas elecciones municipales y autonómicas 2015 están utilizando en la cartelería de campaña. Todos ellos, candidatos y candidatas, se muestran muy sonrientes desde los numerosos postes de nuestras carreteras u otros soportes en las calles de nuestros pueblos y ciudades. Se aprovechan los lugares más insospechados para enviar sus mensajes, y asomarse y despertar el interés electoral de nuestros ciudadanos.

Hace unos días un conocido catedrático de Lengua de la Universidad de La Laguna analizaba en un programa de la Radio Autonómica la cartelería de los partidos políticos en estos comicios autonómicos, insulares y locales del 24 de mayo. De los carteles analizados sólo uno mereció el notable por la claridad en su mensaje electoral. Este es el caso del grupo emergente “Podemos” con un lacónico “Sí,ahora”. Para el experto lingüista el resto alcanzaron el aprobado raspado o bien obtuvieron un suspenso por su ambigüedad o confusión. Los carteles correspondientes a Coalición Canaria, PSC PSOE, Nueva Canarias y Partido Popular obtuvieron un aprobado, entre el 5 o el 6 de nota, mientras que el resto o aprobaban muy apuradamente o fueron suspendidos por su ambigüedad, en ocasiones calculada o por la inconcreción en sus eslóganes. 

El analista de la universidad lagunera recordó a este respecto el mensaje dado a conocer en las Elecciones Generales en octubre de 1982 por parte del PSOE, que era muy escueto, directo y lleno de respuestas a todos los problemas de la sociedad de entonces. El mensaje “Por el cambio” caló de tal manera en los votantes que dio como resultado una mayoría absoluta socialista en el Congreso, con 202 diputados, y otra mayoría muy parecida en el Senado. Fue la campaña electoral de la ilusión por el cambio social y político ante tanto problema de terrorismo, paro y desintegración social. Era la consecuencia del panorama que nos dejó la sangría de la UCD de aquellos años. 

Hoy atravesamos por una situación similar con una desafección ciudadana hacia la política. En este sentido el analista lagunero afirmó que la falta de originalidad en la actual cartelería no encandila a nadie; no enamora a los hombres y mujeres de esta tierra que se enfrentan a una de las crisis más agudas de los últimos tiempos. A la apatía de los mensajes de los partidos tradicionales se une además el protagonismo de los partidos emergentes como “Podemos”,“Ciudadanos” y UpyD, aunque este se mueva ya en los esquemas de los partidos de siempre. Puede decirse que la ambigüedad es la nota común de los anuncios políticos en estos comicios del 24­M. Desde el “De aquí en adelante”, de Coalición Canaria al “Trabajar. Hacer. Crecer” del Partido Popular pasando por el “Gobernar para la mayoría” del PSOE y “Vamos a cambiar Canarias” de Nueva Canarias se observa una serie de mensajes de características diferentes. Sin embargo, ninguno de ellos supera la fuerza y la ingeniosidad del lanzado en 1982 por el Partido Socialista. 

La Cartelería del 2015, en cambio, no está a la altura del estado de ánimo de los partidos políticos en la sociedad española. Falta de imaginación para crear el eslogan adecuado que atraiga la atención del elector más exigente o al más desafectado o pasota. Entre los candidatos tampoco se detecta ingenio y frescura. No son las ideas las que llaman la atención. En ocasiones son las propuestas superficiales o sugerencias para llamar la atención como la del candidato de UpyD al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria quien se presentó días atrás en una cafetería costera y no tuvo otra forma de atraerse a sus votantes hacia su programa electoral que invitar a los presentes a cañas de cerveza por cada pregunta de los presentes. En definitiva que el cansancio y el hastío de los electores no ha logrado despertar las neuronas de los candidatos que en esta ocasión adolecen de inventiva y garra. Habrá que esperar a la noche del 24­M para conocer los mensajes triunfadores en las instituciones canarias.